Hoy mis manos estan vacías.
No encuentran las tuyas,
no tienen quien las guíe hacia dentro,
muy dentro de tí.
Estan huéfanas mis manos,
sin enlazar tus delicados dedos,
tus suaves mejias,
no saben como abrir tus párpados,
ni tus labios humedos, carnosos
y dulces.
Estan secas mis manos,
porque no saben como jugar
sin tus senos, y
curvilineas caderas.
Que vacías estan sin tí.
Y aunque mi cuerpo percibe tu presencia,
mis manos siguen vacías sin sentir
el centro de su sexo.
Si, mis manos estan sin nada,
vacías, secas, y sin aliento,
sencillamente,
porque tu estas ausente.
Roberto Rodríguez
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